Si en algún momento la frase «segundas partes nunca fueron buenas» coge sentido, es en esta película.

Se les ha ido la cabeza. La imaginación, cuando tienes que hilar un guión cinematográfico, debería se contenida. Aquí la dejaron a sus anchas y les ha salido una película, incluso, un tanto ridícula.

Pero oiga! Si de lo que se trata es de hacer caja, pues supongo que se hará. Más nos vale que no o más nos vale que, aunque la hagan, no se sientan tentados a una tercera parte (la película deja intuir que sí. Mal).

Si tenéis ocasión de ir a verla, id a la playa. Aprovecharéis mejor el tiempo.

Qué sería de no ser por nuestras queridísimas BUTACAS VIP!!!

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