Hacía tiempo que no salía del cine tan defraudado como con esta película. Y mira que he salido veces decepcionado…
Aprovechando el tirón del cómico Leo Harlem y de Jordi Sánchez, se construye una película patética, con un guión infantil y previsibles desde el minuto 1.
No pienso dedicar más tiempo a esta opinión.
Solamente decir que no vayáis a verla. Habréis tirado el dinero.
Para las pocas ocasiones que tenía para ir al cine y desperdiciarla así!!!!!!!!
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